La administración de la prisión local de El Aaiún rechazó las acusaciones de malos tratos formuladas por la madre de un menor recluso en un vídeo publicado en las redes sociales.
Afirma que una investigación concluyó que no había pruebas de violencia presuntamente infligida por un funcionario público.
En cuanto a las lesiones del recluso, fueron consecuencia de repetidos actos de automutilación, en particular cuando se golpeó la cabeza contra las paredes. Hospitalizado el 14 de enero de 2025, fue examinado por un psiquiatra que le prescribió un tratamiento, pero el joven supuestamente se negó a seguirlo.