El acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás en Gaza finalmente entró en vigor, tras un retraso que duró horas debido a la negativa de Tel Aviv a empezar a implementarlo antes de recibir una lista de nombres de mujeres detenidas.
El acuerdo, que debía comenzar a las 08:30 hora local, fue activado a las 11:30, volviendo a encarrilar la agenda acordada, pese a los ajustes impuestos por el retraso.
Según el acuerdo, el ejército israelí inició su retirada de las zonas residenciales dentro de la Franja de Gaza, mientras que el tráfico aéreo militar israelí sobre la Franja fue suspendido durante 12 horas, permitiendo a algunos desplazados la posibilidad de regresar a sus hogares en el norte y el sur. Al mismo tiempo, los convoyes de ayuda humanitaria comenzaron a entrar en la Franja de Gaza, a un ritmo de 600 camiones por día, para aliviar el empeoramiento de la crisis humanitaria resultante de los bombardeos y el asedio.
En el marco de los términos acordados, se fijó el momento del proceso de intercambio de prisioneros, ya que está previsto que a las 16:00 hora local (14:00 GMT) tres rehenes israelíes sean liberados a cambio de unos 90 prisioneros palestinos. en un paso que representa una parte esencial del acuerdo. El objetivo es calmar temporalmente la situación sobre el terreno.
Mientras las partes internacionales dan seguimiento a la implementación de este acuerdo, la situación en Gaza sigue abierta a múltiples posibilidades, en medio de la anticipación del alcance del compromiso de las dos partes con los términos de la tregua, y si constituirá el comienzo de una un camino político más amplio, o simplemente una pausa temporal antes de una nueva ronda de confrontaciones.