Los profesionales del sector de los combustibles “esperan un aumento de los precios del diésel y la gasolina” en el surtidor, dijeron Hespress miembro de la Federación Nacional de Propietarios, Comerciantes y Gestores de Estaciones de Servicio de Marruecos, precisando que «el importe de este aumento aún no se conoce, pero se produce después de una serie de reducciones y de una no aplicación de aumentos durante ventas anteriores actualizaciones de precios.
Este profesional, gerente de una estación de servicio en Rabat, explica que “la política comercial adoptada por cada empresa distribuidora de combustible, así como sus existencias, siguen siendo el factor determinante de los precios del combustible. Esta información sobre el alcance del aumento nos llega generalmente el día anterior a su aplicación, y a veces incluso el mismo día», recordando que «desde la liberalización de los precios en el mercado de los combustibles en 2015, la actualización de los precios no se impone necesariamente a un fecha determinada o al final de cada quincena.
Leer: Malas noticias: los precios del combustible en Marruecos se dispararán
Otras fuentes del sector han llamado la atención, por su parte, que «aún no se ha confirmado el nuevo aumento de los precios de los combustibles», destacando que «los precios no han cambiado desde el pasado mes de diciembre, ya que el aumento mencionado para el 1 de enero de este año ( de entre 17 y 20 centavos por litro) no se aplicó”. Según las últimas previsiones mundiales, se espera que los precios del petróleo registren aumentos récord, debido a las nuevas sanciones de Estados Unidos a las compañías petroleras y transportistas rusas.
A principios de esta semana, el Brent alcanzó los 81,11 dólares el barril, mientras que el crudo West Texas Intermediate de Estados Unidos subió a 77,97 dólares, su nivel más alto desde octubre pasado. Según las previsiones de los analistas del mercado petrolero, “las restricciones impuestas a los transportistas rusos podrían provocar un aumento de los precios del petróleo y de los costes de envío, empujando a China e India a buscar alternativas en Oriente Medio y África».