En la década de 1950, la Base Aérea de Nouasseur era una de las principales instalaciones militares de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos en Marruecos. De hecho, fue una de las tres bases utilizadas por Estados Unidos en Marruecos, junto con las de Benguerir y Benslimane. El situado en la región de Casablanca constituyó un verdadero lugar estratégico para los bombarderos dirigidos a la Unión Soviética durante la Guerra Fría.
La instalación albergaba, entre otros, el Convair B-36 Peacemaker, un bombardero pesado que fue diseñado y desarrollado exclusivamente por el ejército estadounidense desde la década de 1940. También en esta base se encontraba el Boeing B-47 Stratojet, un bombardero nuclear puesto en servicio en. 1951. Estos aviones militares se mantuvieron en la base de Nouasseur, bajo contrato con los franceses como fuerza colonial entonces presente en Marruecos.
Tres sitios americanos en Marruecos
Este contrato formaba parte de un acuerdo relativo al funcionamiento de las bases aéreas, apoyado por el Departamento de Defensa de los Estados Unidos debido a la «necesidad urgente de bases SAC en Marruecos (Strategic Air Command, un comando importante de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, según el editor nota). Este acuerdo quedó rastreado en un memorando del secretario de Estado en funciones para Asuntos Europeos dirigido al secretario de Estado estadounidense, según informó la Oficina del Historiador estadounidense.
“Estados Unidos inició negociaciones para el establecimiento de estas bases con el gobierno francés, teniendo en cuenta las responsabilidades de este último en materia de política exterior marroquí en virtud del Tratado de Fez”, explica el documento publicado el 31 de mayo de 1956. Tras la conclusión de un acuerdo en este marco, Washington inició la construcción de la base de Nouasseur en mayo de 1951.
El mismo mes, el general Archie J. Old Jr. llegó a Rabat para instalar el cuartel general del Quinto Aire del SAC. Legalmente, este sitio gestionaba las tres bases construidas para el SAC en Marruecos, incluida la de Nouasseur.
La restitución de las bases aéreas en Marruecos
Cinco años después de la creación de la base aérea de Nouasseur en Marruecos, el gobierno marroquí comenzó a considerar la retirada de las fuerzas estadounidenses del territorio, especialmente cuando se anunció el fin del Protectorado. Según el grupo de investigación independiente Global Security, “la destitución de los líderes franceses en Marruecos y la independencia de Marruecos” el 18 de noviembre de 1956, empujaron al ejecutivo marroquí y a Mohammed V a instar a “la Fuerza Aérea de los Estados Unidos a retirarse de las bases del SAC en Marruecos.
La misma fuente recuerda que Marruecos había insistido en considerar tal enfoque “después de la intervención estadounidense en el Líbano en 1958”. Estados Unidos acordó así ceder sus bases establecidas en Marruecos en diciembre de 1959. Sin embargo, este proceso no tuvo un efecto inmediato y esta retirada se produjo por etapas.
Washington se dio cuenta de que las instalaciones marroquíes “se estaban volviendo menos estratégicas para su uso con el Boeing B-52 Stratofortress de largo alcance, compitiendo con las bases ubicadas en España”, según Global Security. Poco a poco, los estadounidenses finalmente se retiraron definitivamente del país en 1963.
En este sentido, la obra “MiG Alley to Mu Ghia Pass: Memoirs of a Korean War Ace” (Éditions McFarland, 2014) del aviador Cecil G. Foster recuerda este momento en el que los soldados estadounidenses abandonaron las tres bases, incluida la de Nouasseur. «Cuando abandonamos Sidi Slimane, confiamos la base aérea que estaba operativa al gobierno marroquí», recuerda, subrayando que «todos los elementos de esta base estaban en funcionamiento, desde las radios de las torres de control hasta el sistema telefónico». “No había ni una bombilla fundida; todos los grifos funcionaban, no se reportaron fugas”, concluye el trabajo.
Los informes estadounidenses indican que la base aérea de Nouasseur fue absorbida por Marruecos y transformada en un aeropuerto internacional, el actual aeropuerto Mohammed V, situado a unos cuarenta minutos de Casablanca.