La economía nacional habría registrado un crecimiento del 3% en el cuarto trimestre de 2024, frente al 4,3% del trimestre anterior, según la Alta Comisión de Planificación (HCP). Esta caída se atribuye a la desaceleración del sector secundario y terciario.
El valor añadido de las actividades no agrícolas habría aumentado un 3,7%, mientras que la agricultura habría sufrido una contracción del 5,3%.
Se dice que las industrias extractivas crecieron un 6,8%, apoyadas por la producción de minerales no metálicos y la demanda externa de fosfato en bruto.
Sin embargo, la demanda local de fertilizantes disminuyó, lo que afectó a las industrias manufactureras, que crecieron un 3,6%.
El sector agroalimentario ha enfrentado desafíos, en gran parte debido a las sequías, que han llevado al estancamiento de su valor agregado.
Sin embargo, el sector de la construcción se mostró dinámico y aumentó un 6,1% gracias a las inversiones públicas. El sector terciario también aumentó un 3,4%, impulsado en particular por el turismo.
Además, a pesar del crecimiento de ciertos sectores, la agricultura ha tenido un impacto negativo en el desempeño económico general debido a las condiciones climáticas desfavorables.