Desde principios del pasado abril, el cuerpo de Zakaria Radouane, un joven de 25 años, descansa en una morgue en Argelia, país donde fue encontrado después de que el nativo de M'diq intentara nadar hasta Sebta. Las autoridades argelinas están en trámites para autorizar su repatriación a Marruecos.
Zakaria Radouane abandonó su M'diq natal el 9 de marzo de 2024 para unirse al enclave español con el fin de construir un futuro mejor. Desafortunadamente, nunca llegará a su destino. “En lugar de llegar a la costa española, fue el fondo del mar el que la acogió. Su cuerpo fue encontrado varado en las playas de Argelia, en Aïn Témouchent, el 1 de abril de 2024, después de una espera de unos veinte días”, confiesa su hermano.
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La familia de Zakaria ha tomado medidas para recuperar su cuerpo. Una auténtica carrera de obstáculos. Se puso en contacto en varias ocasiones con el Ministerio de Asuntos Exteriores marroquí para que la ayudaran en este proceso de repatriación del cuerpo de su hijo. Las autoridades argelinas, por su parte, están mostrando una lentitud inexplicable en la tramitación administrativa del expediente. La familia espera desesperadamente recuperar el cuerpo de Zakaria para un entierro digno en Marruecos.
Argelia no ha dado su primer golpe. El país de Abdelmadjid Tebboune tiene la costumbre de retrasar la repatriación de los cadáveres marroquíes, explotando así situaciones dramáticas con fines políticos.