El número de víctimas mortales por las devastadoras inundaciones en España registró un nuevo máximo, con 213 personas fallecidas, según declaraciones de la agencia encargada de coordinar las operaciones de socorro, que indicó que la región de Valencia registró el mayor número de víctimas, con 204 muertos, mientras que el resto de las muertes se distribuyeron en las provincias de Castilla-La-Mancha y Andalucía.
Los equipos de emergencia continúan sus esfuerzos para buscar personas desaparecidas en las zonas afectadas, en un momento en el que España asiste a una de las peores olas de inundaciones de su historia moderna. Las autoridades señalan que las duras condiciones climáticas y las dificultades para llegar a algunas zonas aisladas han complejizado las operaciones de rescate y socorro, reforzando los temores de que el número de muertos pueda aumentar.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, anunció ayer en un comunicado los planes del poder ejecutivo de declarar “zonas de desastre” las zonas más afectadas, ya que entre ellas se encuentran Valencia, Castilla-La Mancha, Andalucía, Cataluña y Aragón. Este anuncio permite al gobierno asignar recursos adicionales para acelerar los esfuerzos de ayuda y reconstrucción, y también permite proporcionar compensaciones urgentes a los afectados y facilita el proceso de restauración de los servicios básicos en las zonas afectadas.
Por su parte, Sánchez expresó su pésame a las familias de las víctimas y elogió el esfuerzo de los equipos de emergencia y socorro que trabajan en condiciones extremadamente difíciles para socorrer a los afectados y rescatar a los varados, destacando que el Gobierno español hará todo lo posible. para hacer frente a este desastre y proporcionar pleno apoyo a las zonas afectadas.
Además de los esfuerzos de rescate locales, varios países europeos expresaron su solidaridad con España ante este desastre, y algunos países se preparan para enviar ayuda de emergencia para apoyar los esfuerzos de socorro.
Las condiciones meteorológicas siguen siendo un obstáculo importante para los equipos de socorro, ya que la meteorología prevé que las malas condiciones meteorológicas continúen en los próximos días. Los expertos en clima temen que la frecuencia cada vez mayor de fenómenos meteorológicos extremos, como inundaciones, pueda volverse más frecuente, lo que requiere la adopción de políticas proactivas para proteger las zonas vulnerables.
España continúa evaluando los daños humanos y materiales causados por las inundaciones, y continúan las evacuaciones en algunas zonas aún amenazadas por el aumento del nivel del agua. Se espera que las autoridades anuncien en los próximos días un plan integral de recuperación y reconstrucción, que incluye mejorar la infraestructura y fortalecer los sistemas de alcantarillado en las zonas más vulnerables a las inundaciones, con el fin de reducir la posibilidad de que esta tragedia se repita en el futuro.