Del 20 de septiembre al 20 de octubre de 2024 se elaboraron 52 actas, que abarcan 70 delitos relacionados con la caza y la vida silvestre. Implicadas en las provincias de Essaouira, Taroudant, Nador y Larache, estas sanciones se enmarcan en las acciones que la Agencia Nacional del Agua y de los Bosques (ANEF) está intensificando contra la caza furtiva, para preservar los recursos naturales y la fauna en todo Marruecos.
Para la ANEF, la lucha contra la caza furtiva es, de hecho, “una prioridad absoluta esta temporada”, insistió el director general de la Agencia, durante el lanzamiento de la temporada de caza 2024/2025. «Se llevan a cabo controles intensivos sobre el terreno y los infractores están expuestos a sanciones rigurosas, de conformidad con las leyes que rigen la caza», indica un comunicado de prensa recibido por Yabiladi.
Los delitos observados denotan diversas prácticas ilegales, “algunas de las cuales combinan varios delitos”. Entre estas prácticas se encuentran 25 casos de “caza en reservas o terrenos arrendados, a pesar de la disponibilidad de mapas de reserva y arrendamiento a través de una aplicación web”. La ANEF también constató 17 casos de “uso de medios prohibidos”, entre armas ilegales, vehículos prohibidos o animales para capturar piezas de caza, 12 casos de “caza en períodos de veda, infringiendo el calendario del decreto anual de caza”, 9 casos de «falta de presentación de documentos, en particular la ausencia de una licencia de caza válida», además de 7 casos de caza de especies protegidas, entre ellos «un caso notable de caza furtiva de una gacela cuvier en la región de Taroudant».
Para ANEF, estos resultados son “fruto del trabajo colaborativo entre ingenieros y técnicos forestales”, en coordinación con la Gendarmería Real, las autoridades locales y la guardia federal. «La sociedad civil también contribuyó a estos esfuerzos, denunciando actividades sospechosas y facilitando intervenciones rápidas», subraya la agencia, que insiste en su «política de tolerancia cero en materia de caza furtiva, incluso entre sus colaboradores».
Entre las medidas tomadas en este sentido se encuentra la cancelación de la autorización de una guardia federal después de que se descubriera que el interesado estaba involucrado en un delito de caza furtiva. «Los procedimientos judiciales están en curso, lo que subraya el compromiso de ANEF de garantizar la integridad de los agentes que actúan en su nombre y la transparencia de sus actuaciones», dijo la agencia.
Además, “invita a la sociedad civil y a las asociaciones de cazadores a continuar sus esfuerzos para concienciar y apoyar a los cazadores”. En este sentido, destaca que “la preservación de los recursos naturales es una responsabilidad colectiva, que requiere la implicación de cada ciudadano para respetar las normas de protección de la vida silvestre y denunciar cualquier actividad sospechosa a las autoridades competentes”.
