En declaraciones a la Agencia Anadolu, Hamdan confirmó que la hambruna está empeorando en el norte de la Franja de Gaza, en medio de la política de «genocidio israelí» y «limpieza étnica» a la que están sometidos los palestinos en la región.
Hamdan dijo: “Durante las últimas dos semanas, hemos advertido repetidamente que el endurecimiento del asedio a Jabalia y el norte de Gaza exacerba aún más la catástrofe humanitaria, y la continua agresión israelí en estas áreas expone a decenas de miles de civiles a un gran peligro”.
Señaló que «el ataque militar en el norte de Gaza impide el acceso de los residentes a las necesidades básicas, incluidos agua y alimentos». Advirtió: «El campo de Jabalia ha estado sitiado durante más de dos semanas y estamos recibiendo informes de familias atrapadas en sus casas, sin agua y alimentos».
Respecto a la situación médica, Hamdan dijo: “Las fuerzas israelíes atacaron dos de los tres hospitales que quedaban en el norte de Gaza (el hospital Al-Awda y el hospital indonesio), lo que exacerbó la crisis humanitaria”. Señaló que «algunos pacientes del hospital indonesio perdieron la vida debido a cortes de energía y falta de suministros médicos».
Hamdan añadió que las autoridades israelíes aún no han implementado una solicitud urgente presentada por las Naciones Unidas para llegar al norte de Gaza para rescatar a los atrapados bajo los escombros. Pidió a «Israel que permita que los equipos humanitarios y de rescate lleguen inmediatamente a las personas sitiadas, porque cada minuto de retraso aumenta la magnitud del desastre».
En cuanto a los palestinos desplazados, Hamdan explicó que 7 centros de refugio en el norte de la Franja de Gaza fueron evacuados, señalando que “los civiles no tuvieron más remedio que huir, ya que todos los servicios básicos fueron suspendidos, incluidos los servicios de la UNRWA, y sólo dos pozos de agua funcionaban”.
Respecto a la situación en el resto de la Franja de Gaza, destacó que “la situación humanitaria en el centro y sur de Gaza no es mucho mejor, ya que no permite un flujo adecuado y regular de suministros”. Advirtió que «el número de camiones que entran es muy pequeño en comparación con las enormes necesidades».
Es de destacar que el 5 de octubre el ejército israelí inició un bombardeo sin precedentes sobre el campo de Jabalia y amplias zonas del norte de Gaza, antes de anunciar el inicio de una invasión terrestre de la región con el objetivo de “impedir que el movimiento Hamás recupere su poder”. ”, mientras los palestinos acusan a Israel de intentar ocupar la región y desplazar a sus residentes.