El Proyecto de Ley de Finanzas (PLF) 2025 propone un conjunto de medidas fiscales destinadas a reducir la carga para los ciudadanos y fortalecer el clima empresarial en Marruecos. Entre las principales reformas, el aumento del primer tramo del impuesto sobre la renta (IR) de 30.000 a 40.000 dírhams exime todos los ingresos salariales inferiores a 6.000 dírhams mensuales. Al mismo tiempo, la reducción del tipo impositivo marginal al 37% marca el deseo de relajar aún más los impuestos para las clases media y alta.
El PLF 2025 también incluye medidas de apoyo al sector agrícola, con una exención temporal del IVA en determinadas operaciones relativas a animales vivos y productos agrícolas. El gobierno también planea aumentar la proporción del IVA asignada a las autoridades locales, del 30% al 32%, fortaleciendo así la financiación local. Esta iniciativa se enmarca en una dinámica de desarrollo territorial equilibrado.
En materia de tasas de registro, están previstos ajustes para aclarar el tratamiento fiscal de los arrendamientos de más de diez años y reforzar la transparencia. Los notarios deberán transmitir electrónicamente los documentos firmados, con miras a modernizar los procedimientos administrativos. Además, se conceden exenciones a las familias de Chouhadas y a los soldados heridos, en reconocimiento a su sacrificio.
Además, el PLF ofrece incentivos fiscales para fomentar grandes eventos deportivos como la FIFA en Marruecos. Finalmente, la reforma del Código General Tributario (CGI) continúa con la integración de nuevos impuestos, como el del cemento, y medidas encaminadas a fortalecer la colaboración entre la administración tributaria y los contribuyentes a través de procedimientos de concertación amistosa. Estas medidas tienen como objetivo garantizar una mayor transparencia y una gestión óptima de los recursos tributarios.
M.Ba.