Este caso, que data de 2019, fue inicialmente desestimado en primera instancia, antes de ser relanzado por el tribunal de apelación. Este declaró culpable al marido de “violación conyugal” y de “lesiones graves a la integridad física” de su esposa.
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El 10 de octubre, el Tribunal de Casación anuló esta condena y remitió el caso al Tribunal de Apelación de Tánger. Esta decisión se produce en un contexto de debate en Marruecos sobre la cuestión de la violación conyugal. En los últimos años, varios casos similares han llegado a los tribunales.
En 2022, el Tribunal de Apelación de Tánger condenó en particular a un hombre por violación y agresión sexual violenta a su esposa, en virtud de los artículos 485 y 486 del Código Penal.
