“El sector está empezando a tomar el camino hacia una mayor organización. De hecho, un circuito organizado se está desarrollando de forma lenta pero segura. Estas últimas, todavía limitadas, representan actualmente sólo el 2% del total de las transacciones del mercado, con unas 14.000 transferencias al año”, escribe la revista. Noticias financieras semanales.
Muchos talleres, distribuidores y concesionarios de automóviles invierten cada vez más en la venta de vehículos usados. El gran interés en este segmento se justifica por sus ventajas económicas. “La principal ventaja del vehículo usado (VO) es su coste, que es mucho menor que el de un vehículo nuevo. Además, los vehículos están disponibles inmediatamente y la transacción puede completarse en pocas horas, a diferencia de la compra de uno nuevo, que puede tardar días o incluso meses en caso de escasez de existencias… En VO, Es posible encontrar modelos, acabados o colores que no se encuentran en los concesionarios locales”, explica Adil Berrada, mecánico afincado en Casablanca, citado por la revista.
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El mercado, sin embargo, sigue enfrentando el predominio del sector informal, que arroja dudas sobre la autenticidad de los datos y documentos, así como sobre la fiabilidad del estado técnico del vehículo. Esta situación lleva a muchos clientes a recurrir a los servicios de operadores que ofrecen garantías de 3 a 12 meses sobre los vehículos vendidos.
Narsa trabaja para reordenar el mercado de vehículos usados. Entre otras actuaciones, ha puesto en marcha una plataforma online dedicada a las transferencias de vehículos, que permite comprobar la posible existencia de embargos u oposiciones. «Narsa también colabora con entidades de crédito para luchar contra el fraude, en particular en lo que respecta a la falsificación de documentos de autorización de vehículos adquiridos a crédito», leemos. La agencia también prevé crear un sistema de interfaz con otras instituciones como la Asociación Profesional de Sociedades Financieras (APSF), las aduanas, la policía y la gendarmería, con el fin de intercambiar información para una mayor transparencia y seguridad en las transacciones.