El conflicto armado en curso en la región de Medio Oriente ha comenzado a generar preocupación entre la comunidad internacional, especialmente después de que entró en una etapa crítica entre Irán e Israel, los dos países que poseen un arma nuclear que podría acabar con la existencia humana si uno o ambos recurrido a blandirlo en este conflicto furioso.
En este sentido, el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, renovó su llamado a un desarme nuclear “completo” en todo el mundo.
En un mensaje de felicitación dirigido a la organización japonesa «Nihon Hidankyo», ganadora del Premio Nobel de la Paz del año 2024, el Secretario General de las Naciones Unidas subrayó que «la única manera de eliminar la amenaza de las armas nucleares es eliminarlas completamente.»
Dijo que las armas nucleares todavía representan un peligro «claro y presente» para la humanidad, lo que una vez más es evidente en el discurso cotidiano de las relaciones internacionales.
Por otro lado, Guterres señaló que los supervivientes de las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki, también conocidos como hibakusha, son testigos del horrendo coste humano de las armas nucleares.
«Aunque su número disminuye cada año, el arduo trabajo y la resistencia de los hibakusha constituyen la columna vertebral del movimiento global para eliminar las armas nucleares», dijo, y agregó que este trabajo es «una fuente de inspiración para nuestros esfuerzos conjuntos para construir una mundo libre de armas nucleares”.
La organización Hidankyo incluye a supervivientes de los bombardeos nucleares de Hiroshima y Nagasaki en 1945. La organización recibió el Premio de la Paz “por sus esfuerzos por un mundo libre de armas nucleares y por demostrar, a través de testimonios, que las armas nucleares nunca deben volver a utilizarse. «
