Ayer domingo, el ejército israelí llevó a cabo decenas de incursiones en el Líbano, dejando casi 60 mártires, dos días después de que el secretario general de Hezbollah, Hassan Nasrallah, fuera asesinado junto con otros líderes en una incursión israelí en el suburbio sur de Beirut..
En otro frente, el ejército de ocupación también lanzó ayer ataques aéreos contra dos puertos y dos centrales eléctricas en la gobernación de Hudaydah, en el oeste de Yemen, controlada por los hutíes, durante los cuales al menos cuatro personas murieron y otras 33 resultaron heridas, según lo que informó el canal Al-Masirah, afiliado a los hutíes.
El sábado, los hutíes se atribuyeron la responsabilidad de un ataque con misiles contra el aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv.
Al-Masirah TV dijo: «Los ataques del enemigo israelí tuvieron como objetivo los puertos de Hodeidah y Ras Issa, y las centrales eléctricas de Al-Hali y Al-Khatheeb».
Más tarde informó que las redadas provocaron la caída de “cuatro mártires, entre ellos un trabajador portuario y tres ingenieros eléctricos, y 33 heridos, como balance preliminar de la agresión israelí en la gobernación”, señalando que ambulancias y equipos de rescate todavía están buscando. para personas desaparecidas.
Por su parte, el portavoz militar del ejército de ocupación israelí, David Abraham, afirmó durante un comunicado de prensa: “En una operación aérea a gran escala hoy, decenas de aviones de la Fuerza Aérea, incluidos aviones de combate, aviones de reabastecimiento de combustible y aviones de reconocimiento, atacaron objetivos militares del régimen terrorista hutí en las regiones de Ras Issa y Hodeidah”.
Añadió que el ejército «atacó centrales eléctricas y un puerto marítimo utilizado para las importaciones de petróleo».
La misma fuente afirmó que los sitios atacados son utilizados por los hutíes, que tomaron el control de la capital, Saná, en 2014, «para transferir armas iraníes a la región y suministros para las necesidades militares».
El portavoz continuó: «El ataque se llevó a cabo en respuesta a los recientes ataques lanzados por el régimen hutí contra el Estado de Israel».
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) condenó el ataque israelí a Yemen, considerándolo “una extensión de la agresión y criminalidad de la ocupación (…) con un apoyo estadounidense descarado y abierto”.
Los hutíes confirmaron el sábado que el asesinato por parte de Israel del secretario general de Hezbollah, Hassan Nasrallah, «fortalecerá la determinación» de atacar al ejército ocupante.
Los rebeldes yemeníes han lanzado varios ataques contra Israel desde el inicio de su agresión militar en la Franja de Gaza a principios de octubre pasado.
En respuesta, Israel lanzó ataques contra una central eléctrica y depósitos de combustible en el puerto de Hodeidah.
Los hutíes, que controlan grandes zonas de Yemen, forman parte de lo que Irán llama el “eje de resistencia”, que incluye especialmente a Hamás y Hezbolá.
También atacan periódicamente barcos que, según dicen, están vinculados a Israel o Estados Unidos y el Reino Unido en el Mar Rojo y el Golfo de Adén. Estados Unidos lanzó incursiones contra objetivos hutíes en Yemen, en algunas de las cuales participó el ejército británico.