Este programa, con un presupuesto previsto de aproximadamente 2,5 mil millones de dírhams, tiene como objetivo apoyar y acompañar la reconstrucción y rehabilitación de edificios y viviendas dañados, así como la rehabilitación de las infraestructuras viarias, las redes de telecomunicaciones, las redes de electricidad y agua potable y de saneamiento.
El Gobierno ha movilizado «todos los recursos humanos y logísticos» para responder rápida y eficazmente a las necesidades de la población afectada y ha pedido a los distintos departamentos ministeriales interesados que garanticen la correcta aplicación de este ambicioso programa, indica un comunicado del jefe de la gobierno.
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Las provincias cubiertas por este programa son Errachidia, Midelt, Ouarzazate, Tinghir, Zagora, Figuig, Jerada, Taroudant, Tata, Tiznit, Guelmim y Assa Zag. Las actividades agrícolas en las zonas de catástrofe también se beneficiarán de apoyo, en particular mediante la reparación de estructuras hidráulicas de tamaño pequeño y mediano y el apoyo a los ganaderos que perdieron su ganado debido a las inundaciones.
Las lluvias torrenciales que cayeron sobre la provincia de Tata provocaron importantes inundaciones y provocaron considerables pérdidas humanas y materiales. El informe provisional elaborado por las autoridades locales indica dos muertos y 15 desaparecidos, incluidos 14 pasajeros de un autocar arrastrado por las aguas del Wadi Tata.
