El PJD se pronunció sobre el éxodo colectivo de miles de jóvenes hacia Ceuta; 3.000 según cifras oficiales. Los islamistas pidieron a la fiscalía general que dilucidara las circunstancias de estos incidentes, para luego lanzar una andanada de flechas contra el gobierno presidido por Aziz Akhannouch. «La situación en nuestro país está marcada por un alto nivel de pérdida de confianza en las instituciones», señaló la secretaría general del PJD en un comunicado de prensa.
El organismo atribuyó este éxodo masivo “a la desviación de la vía democrática”. Un proceso que se inició “durante el “bloqueo” político de 2016 y alcanzó su punto máximo en las elecciones del 8 de septiembre de 2021, dando origen a un gobierno débil y sin apoyo popular (…) Un contexto que generó una situación de desesperación y Aversión especialmente entre los jóvenes”, subraya la misma fuente.
Recordemos que el “bloqueo” en cuestión caracteriza el período posterior a las elecciones legislativas del 7 de octubre de 2016, ganadas por el PJD con 125 escaños en la Cámara de Representantes. Duró seis meses, marcados por un profundo desacuerdo entre Benkirane, reelegido jefe de Gobierno el 10 de octubre de 2016 por el rey Mohammed VI, y Aziz Akhannouch, entonces recién elegido presidente del RNI, en el congreso extraordinario del 29 de octubre de 2016. sobre la composición del ejecutivo.
El 15 de marzo de 2016, el soberano puso fin a este enfrentamiento entre los dos protagonistas del “bloqueo”, confiando a Saad-Eddine El Othmani, también del PJD, la misión de formar un nuevo gobierno.