Esta acusación es falsa, declaró la Asociación, que se reserva el derecho de recurrir a los tribunales. Recuerda haber denunciado las exiguas primas que la empresa china paga a los trabajadores marroquíes, concretamente 45 dírhams por tonelada, durante una reunión con la diputada Farida Khiniti del Partido del Progreso y el Socialismo (PPS) y una delegación sindical del Sindicato Marroquí de Trabajadores.
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La asociación denuncia también «la obligación impuesta a los trabajadores de firmar un contrato de trabajo con una empresa especializada en seguridad, limpieza y cocina, lo que constituye una violación flagrante del decreto que regula el contrato de trabajo en las minas y del Código de trabajo», así como “el incumplimiento de la jornada laboral y la aplicación de la ley relativa a las horas extraordinarias”, “la privación de los trabajadores de medios de protección, medicamentos y una oficina administrativa fija”.
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La asociación también mencionó «la importación de camiones de 30 toneladas desde fuera de la provincia y su uso en la frágil vía» entre dos municipios, así como «la exclusión de empresas locales, provinciales y regionales, en beneficio de empresas fuera de la región». «, sin olvidar «el uso de productos químicos mezclados con agua para limpiar el polvo de hematita, sin el más mínimo medio de protección» y «el flejado de la mina y el cierre de la carretera principal que conecta Ikssane con los pueblos circundantes».