La Mamounia ocupa el puesto 31, mientras que el Royal Mansour ocupa el puesto 38 en este ranking anual elaborado por William Reed Business Media. Además de esta distinción, el Royal Mansour recibió el premio Art of Hospitality por su incomparable calidad de servicio.
Inaugurada en 1923, La Mamounia celebró su centenario el año pasado y fue renovada para conmemorar la ocasión. Este emblemático hotel en Marrakech, que combina tradición y modernidad, ha sabido mantener su autenticidad y lujo a lo largo del tiempo. Según “The World's 50 Best”, alojarse en La Mamounia “es una experiencia casi religiosa”. “El sitio se remonta al siglo XVIII, cuando el hijo del sultán Mohammed Ben Abdallah transformó sus fragantes tierras –una cacofonía visual de olivos silvestres y naranjos, cactus, palmeras y buganvillas– en un lugar para suntuosas fiestas en el jardín”, informamos.
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El establecimiento, que ha acogido a personalidades como Winston Churchill, Charlie Chaplin e Yves Saint-Laurent, dispone de habitaciones y suites de lujo con vistas a los jardines, además de alojamientos privados. En cuanto a la restauración, ofrece platos italianos, asiáticos y franceses.
En cuanto al Royal Mansour, fue inaugurado en 2010 por el rey Mohammed VI. Más que un hotel, es “una manifestación física de todo lo marroquí”, según “The World's 50 Best”. Los materiales utilizados para su construcción, así como su decoración, representan un bello homenaje a la artesanía marroquí. La particularidad del Royal Mansour reside en sus riads privados con patio interior, piscina y servicio personalizado de mayordomo, que ofrecen a los visitantes un confort único. “La experiencia culinaria en Royal Mansour es igualmente excepcional”, afirma, indicando que el establecimiento ofrece cocina marroquí.