Once personas perdieron la vida y otras nueve están desaparecidas tras las fuertes lluvias torrenciales que afectaron a 17 prefecturas y provincias de Marruecos, según un informe provisional del Ministerio del Interior. De las muertes, siete se registraron en la provincia de Tata, dos en Tiznit y otras dos en Errachidia, incluido un ciudadano extranjero. Las desapariciones fueron denunciadas en las provincias de Tata, Errachidia y Taroudant.
Las precipitaciones registradas en los dos últimos días alcanzaron o superaron la mitad de las medias anuales en algunas zonas: 250 mm en Tata, 203 mm en Tinghir, 114 mm en Figuig y 82 mm en Ouarzazate. El mal tiempo provocó importantes daños materiales, con el derrumbe de 40 viviendas y varias infraestructuras. Además, 93 tramos de carretera resultaron dañados, aunque se restableció el tráfico en 53 de ellos.
Las autoridades, en particular las Fuerzas Armadas Reales, la Gendarmería Real y Protección Civil, se movilizaron desde el principio para prestar asistencia a las poblaciones afectadas y reparar los daños causados a las redes de carreteras, electricidad y agua potable. El Ministerio del Interior pide vigilancia debido a las condiciones meteorológicas aún inestables.
M.Ba.