Durante el último mercado de transferencias, el internacional marroquí Yahya Attiat-Allah del club ruso Sochi fichó por el Al Ahly de Egipto. Lo mismo ocurre con Achraf Dari, su excompañero en el Wydad Casablanca, que dejó el Stade Brestois por el club egipcio. Mahmoud Bentayg, exjugador del Raja de Casablanca, llegó al club Zamalek procedente de Saint-Étienne.
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Los seguidores marroquíes expresaron su enfado por estas salidas de talentos marroquíes a Egipto. Según algunos analistas, la llegada de jugadores marroquíes a Egipto podría explicarse por la difícil situación financiera de los clubes marroquíes de Botola, entre ellos el Raja y el Wydad de Casablanca, y el AS FAR, en comparación con los clubes egipcios.
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Según este último, los clubes marroquíes se están derrumbando bajo el peso de las deudas y se ven incapaces de contratar jugadores con un valor medio de mercado. Lamentablemente, esta avalancha de jugadores marroquíes hacia los clubes egipcios continuará mientras no mejore la salud financiera de los clubes de Botola, según creen los observadores.