Los dos marroquíes recibieron cada uno una medalla al mérito de la protección civil por este acto heroico. Una distinción que les permitía solicitar la nacionalidad española por naturalización, concedida por el gobierno español en casos excepcionales. Su solicitud de ciudadanía incluía prueba del rescate, así como antecedentes penales emitidos por las autoridades españolas y marroquíes. El gobierno español aprobó recientemente esta solicitud, concediendo así la nacionalidad por naturalización a estos dos marroquíes. La decisión ya ha sido publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), retransmite El Español.
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Para Hamza y Abdessamad, es un “sueño” hecho realidad. Abdessamad llegó legalmente a España, precisamente a Sebta, con 17 años. Tras dos meses en la ciudad autónoma, se escondió debajo de un camión que abordó un ferry con destino a Málaga. De allí pasó a Barcelona y luego a Lleida, donde fue internado en un centro para menores no acompañados. Abdessamad, que ahora tiene 23 años, vive con otros jóvenes en un apartamento. El joven, que soñaba con ser futbolista profesional, reconoce sentirse como en casa en Lleida, a pesar de las dificultades. Está buscando activamente un trabajo para mantenerse.
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En cuanto a Hamza, llegó a España con 16 años, escondido debajo de un camión. Al igual que Abdessamd, viajó luego a Cataluña, donde fue internado en un centro para menores de Juneda. Cuando alcanzó la mayoría de edad, se mudó a un apartamento. Tras realizar cursos de ingeniería civil en el Instituto Municipal de Ocupació (IMO), encontró trabajo en una empresa de demoliciones. Actualmente trabaja en proyectos municipales. Los dos marroquíes ven en la obtención de la nacionalidad española una “esperanza” para seguir construyendo su vida en España.