Los servicios de policía de Casablanca detuvieron a un total de 110 personas, entre ellas 55 menores, al margen del partido entre el Raja Casablanca y la Guardia Nacional, el sábado 24 de agosto. Los imputados son sospechosos de participación en actos de violencia, agresiones y agresiones contra agentes durante el ejercicio de sus funciones y daños a la propiedad. Según una fuente de seguridad, los sospechosos estarían involucrados en estos actos delictivos encuadrados en el vandalismo deportivo, incluido el lanzamiento de piedras contra vehículos de la Seguridad Nacional, además de negarse a cumplir.
Durante los hechos de violencia, tres policías heridos fueron hospitalizados para recibir el tratamiento necesario. Los adultos entre los acusados fueron puestos bajo custodia policial, mientras que los menores quedaron bajo vigilancia, a disposición de la investigación judicial en curso.