Boeing ha suspendido los vuelos de prueba de su nuevo avión de fuselaje ancho, el 777X, tras detectar fallos en un componente que conecta el motor con la carrocería del avión.
El fabricante de aviones americano está realizando actualmente inspecciones en esta pieza y en otras similares. Por otra parte, inicialmente estaba previsto que el 777X entrara en servicio en 2020, pero su lanzamiento se retrasó hasta 2025 debido a retrasos en el proceso de certificación.