Ciertas prácticas deshonrosas observadas en las playas marroquíes empujan a muchos turistas marroquíes a pasar sus vacaciones de verano en Andalucía, especialmente en la Costa del Sol, en el sur de España. A diferencia de años anteriores, los marroquíes residentes en Bélgica, Países Bajos, Francia y Alemania también optan por el mismo destino.
El sur de España sigue siendo popular entre los marroquíes. Este año, todavía son muchas las personas que pasan sus vacaciones en las playas de la Península Ibérica durante este periodo estival. Prueba de ello es el número de familias marroquíes que van allí, así como el número de coches matriculados en Marruecos. ¿Qué tiene de especial este año? A ellos se sumaron miembros de la comunidad marroquí en el extranjero que viven, en particular, en Bélgica, los Países Bajos, Francia y Alemania. Así, “varias familias residentes en Marruecos o en países europeos organizan reuniones con sus familiares residentes en el extranjero en ciudades españolas, para pasar juntos sus vacaciones en centros turísticos, especialmente en la Costa del Sol”, informa Al Ahdath Al Maghribia.
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En el origen de la atracción de los marroquíes por el sur de España se encuentran prácticas deshonrosas que se observan en las playas marroquíes: la existencia de redes de estafas dirigidas por delincuentes que exigen «regalías» a cualquiera que desee descansar en la arena. Según la prensa local, se trata de redes de alquiler de sillas y sombrillas, cuyos iniciadores cobran estos “regalías” bajo coacción. Hechos confirmados por un buen número de marroquíes que pasan sus vacaciones en España. A estas prácticas se suma la frecuentación de las playas marroquíes por personas que califican de “freaks”, así como el chantaje que ejercen sobre los turistas.
