En Marruecos, la prohibición de llevar burkinis en las piscinas de determinados hoteles impide a las mujeres musulmanas disfrutar plenamente de sus vacaciones de verano. La medida se considera discriminatoria y se considera una violación del derecho de las mujeres a usar la ropa de su elección.
Cada verano, muchas mujeres musulmanas se quejan de esta medida adoptada por algunos hoteles o playas privadas que prohíben llevar el burkini. Estas mujeres dicen estar sorprendidas cuando se les niega el acceso a piscinas o playas privadas a causa del burkini que llevan por motivos de creencias religiosas, pero también de salud para evitar exponerse a los rayos del sol.
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Numerosos internautas han denunciado esta medida que consideran una violación del derecho al descanso y al ocio, explicando que la prohibición de nadar a causa del burkini es infundada y no responde a ninguna lógica. Algunos internautas han refutado los argumentos de que el burkini emite sustancias químicas nocivas, señalando que la prenda está hecha de los mismos tejidos que los trajes de baño normales.
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Las mujeres musulmanas tienen derecho a vestir la ropa que elijan, insistieron los internautas, invitando a los propietarios de hoteles y piscinas a respetar este derecho y poner fin a estas medidas discriminatorias.